La importancia de la educación musical (reflexión personal)

 O mejor dicho de una BUENA educación musical.

¡Buenas tardes!

No vengo a dar una clase magistral sobre música, no soy ninguna experta. Simplemente vengo a hablar de la música, de lo que significa para mí y lo que creo que significa para la sociedad en general.

Y estaréis pensando, "si no eres experta, ¿de qué nos sirve tu opinión?". Espero que al menos para haceros reflexionar, como hizo el otro día mi amiga Belén ( de @abracitosdepapel ) conmigo por Instagram.

Ella puso por stories que no veía bien que se discriminaran ciertos estilos musicales, como por ejemplo el reggaeton, cuando otros más "aceptados" tampoco es que sean ideales.

Ante todo quiero destacar que a mí personalmente no me gusta el reggaeton, pero es cierto que lo demonizamos por sus letras, cuando en casi todos los estilos encontramos canciones que no son del todo apropiadas.

Yo que me creo una moderna y hace 2 años no sabía ni quién era Carlos Sadness (aunque ahora lo idolatre), no soy quien para dar lecciones sobre qué estilos de música se deben no escuchar o no a ciertas edades. Ya que antes ahora y siempre, mi cantante favorito será Marc Anthony, que no destaca precisamente porque sus letras sean lo más respetuosas por ejemplo, con las mujeres. Por poner un ejemplo podríamos hablar de una de sus últimas canciones que en el estribillo dice la preciosa frase "contigo todos los lunes parecen viernes", que si se quedase ahí no estaría del todo mal, pero continúa diciendo "de día es él, pero de noche me perteneces". Ya no entrando en el tema de las infidelidades, sino en el de la pertenencia, está claro que no es del todo correcto. Y también os digo, que sabiendo como lo sé, Marc Anthony no va a dejar de gustarme, pero soy consciente de que lo que dice no está bien.

Ahí entra el papel de la educación, es imposible evitar que los niños y las niñas de hoy en día escuchen reggaeton rock, trap o pop, ese pop que tenemos tan idealizado y que solamente es un lobo con piel de cordero. Lo que tenemos que enseñarles es a saber que lo que escuchan puede estar o no bien, que sepan analizarlo y distinguir lo que les puede gustar por el ritmo pero no por la letra.

Nosotros como ejemplo debemos enseñarles que no siempre lo que escuchen es lo que deben poner en práctica, ya que la mayoría de las canciones hablan del amor y en ellas entran sentimientos como celos, pero depende de como se diga pueden ser indicadores de relaciones tóxicas.

Yo creo que no existe el estilo o el autor de canciones ideal (aunque el otro día me hicisteis ver que Miki Núñez si lo era por los votos que le disteis en las encuestas que os dejé), sino que existen buenxs oyentes que son capaces de identificar aquello que nos quieren expresar.

Pero que la música no pare jamás (please don't stop the music), es necesaria, terapéutica. A mí me da vida, con sus ritmos y sus letras, sea en el idioma que sea. Este confinamiento me ha salvado y me ha hecho conocer a grandes artistas como son Guitarricadelafuente, Barry Brava, Las Ginebras, Delaporte...Y recordar grandes temazos de artistas que marcaron mi adolescencia como David Bustamante o Sergio Rivero. 

Para terminar quería compartir con vosotrxs un vídeo precioso que vi el otro día en las noticias de una mujer que había sido bailarina en su juventud y ahora, en la vejez, con Alzheimer, la música estaba siendo su mejor aliada para combatir esta enfermedad, al menos cuando esta sonaba.

 

Ya sabes...

¡Nos leemos pronto!